Desde los inicios
del fuego el hombre comenzó aplicar técnicas de cocina.
El método utilizado en la antigüedad como mecanismo de
cocción fue el aplicar directamente la llama proveniente del fuego; éste
provenía de fogatas improvisadas con troncos de madera de los arboles más
cercanos que pudiera conseguir.
Al inventarse las vasijas o piezas de barro en el año 5000 ac
se comenzaron a producir los primeros hornos hechos con adobe a base de paredes
refractarias que permiten realizar una cocción firme y homogénea evitando de
esa manera el fuego brusco producido por la irregularidad del fuego. Luego
en el año 7000 a.c. comenzó el proceso de modernización en la cocina.
Se produjeron infinidades de vasijas de barros permitiendo
así cocinar alimentos, asarlos, calentarlos e incluso preparar diversas mezclas
para la realización de sopas. Ese fue el fin de la cocina primitiva y
se comenzó a hablar con propiedad de diversas técnicas o métodos en la cocción
de alimentos.
Los inicios en la
creación de complementos de cocina utilizando el barro como elemento en
variedad de creaciones llamaron la atención al hombre a realizar vajillas, así
como otros utensilios de utilidad en el hogar. En el siglo XVIII un inventor
británico comercializo una versión metálica de cocina y su fuego provenía de la
leña o el carbón evitando que los utensilios no estuvieran en contacto directo
con el fuego.
No hay comentarios:
Publicar un comentario